Ningún concello de la comarca coruñesa pudo contener el año pasado la hemorragia laboral que ha colocado a la provincia al frente de la destrucción de empleo en el tramo final del 2011. En solo doce meses, 2.796 vecinos de los 22 ayuntamientos que conforman el área de influencia de A Coruña se han inscrito como demandantes de empleo en las oficinas del Servicio Público de Empleo Estatal.
Así, el total de parados registrados en las oficinas del antiguo Inem escaló hasta los 37.257, un 8,1 % más que los 34.461 que había contabilizados al cierre del 2010. Un alza que no se ha repartido de forma homogénea entre los diferentes ayuntamientos.
La peor parte se la lleva el interior de la comarca, donde el aumento del paro hay que medirlo con dos dígitos. Es el caso de Irixoa, con un 44,7 % más de paro en solo un año. Pero no menos preocupante es la situación de Curtis o Mesía, donde el alza del paro supera el 33 % en doce meses. Se trata de concellos con poca población activa, por lo que las variaciones, aunque pequeñas en términos absolutos, son muy abultadas.
Los ayuntamientos del cinturón urbano de A Coruña es donde más se ha contenido el desempleo a lo largo del 2011, con incrementos que van del 11,6 % de Cambre al 1,8 % de Abegondo, que es donde mejor han resistido el embate del paro. En A Coruña ciudad, el 2011 se saldó con 1.283 nuevos desempleados, hasta hacer un total de 21.395.
Por sectores, seis de cada diez parados coruñeses proceden del sector servicios (22.841), frente a los 5.555 que expulsó la construcción y los 4.887 que provienen de la industria. El sector primario es el que está resistiendo con más consistencia la crisis, ya que solo contribuyó con 538 parados a la estadística, apenas un 1,5 % del total.
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